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martes, 15 de octubre de 2024

Broken: Capítulo 4

 


17 años antes

Después de ese mensaje el viernes por la noche, Jae Joong supo que algo estaba empezando entre ellos dos. Quizás era muy pronto aún para decirlo, realmente cualquier persona con la que hablara de YunHo y su plática del fin de semana por mensajes le diría que se estaba adelantando demasiado, pero no podía evitarlo. Jae Joong no solía hacer esas cosas, ilusionarse con chicos guapos o que estuviera desesperado por iniciar una relación, de hecho estaba muy a gusto soltero después de haber pasado por una muy mala y tóxica relación de la que por fin había podido librarse, pero el haber empezado a hablar con YunHo, el hecho de que él hubiera tomado la iniciativa para contactarlo y ese juego de miradas durante las últimas dos semanas antes de dirigirse la palabra significaba algo más profundo para Jae Joong que un simple nuevo amigo o ligue. 

Sin embargo, YunHo era una persona muy compleja según la perspectiva de Jae Joong, lo pudo notar desde que hablaron ese viernes por la noche y así como de repente empezaron a platicar durante todo el fin de semana, YunHo dejó sus mensajes abiertos y sin responder cuando inició la semana. 

-Me parece muy raro este chico, ¿crees que no le gusté?, ni siquiera creo que te puedas dar cuenta de eso por simples mensajes – dijo Jae Joong un tanto preocupado a Yoochun, quien tan solo miraba su teléfono buscando su horóscopo semanal en Twitter.

-Yo creo que ese tipo es demasiado serio y le sigue dando pena hablarte – 

-Bueno pero ya rompió esa barrera el viernes, ya no debería de ser tan complicado – 

-Quizás no quiere verse muy intenso y mostrar tanto interés porque piensa que no le gustarás, justo como tú piensas y por eso no le respondes inmediatamente cuando te envía un mensaje – habló YooChun para calmar a su amigo. 

-Si… supongo que puede ser eso – suspiró el pelinegro y dejó su cabeza descansar en su libro cerrado de Farmacología. 

-Lo verás el viernes ¿no? – preguntó YooChun mientras buscaba en su libro de Patología el capítulo que tenía que leer para el día siguiente.

-Se supone, a ver qué pasa, la verdad tengo mucha pena de hablarle, y ni siquiera puedo perder tiempo pensando en él, tengo examen el viernes y tengo mucho que estudiar – respondió un tanto preocupado volviéndose a sentar derecho en la silla de la biblioteca. 

-Tú tranquilo, estoy seguro de que pasará algo interesante, estudia bien y solo deja que las cosas fluyan – 

Asintió a lo que le dijo su amigo pero aun así no estuvo tranquilo, al menos no hasta que encendió su laptop y se puso a hacer sus notas de diuréticos para estudiar.

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El tan esperado y temido viernes llegó. 

Jae Joong iba de nuevo vestido formal y respiró hondo cuando se acercó al auditorio donde tendrían la sesión de todas las semanas. Vio a uno de los pasantes llegar con una hielera y minutos después más instructores entrar al lugar, pero en ningún lado estaba YunHo. Le echó un vistazo a la hora en su teléfono y suspiró derrotado porque ya eran las 11:00 am y no podía esperar más, así que entró y se sentó en uno de los últimos lugares.

La sesión empezó, pero él lo único que estaba haciendo en ese momento era prácticamente acto de presencia, estaba repasando sus notas para su examen de las 3:00 pm. Escuchaba de repente a sus demás compañeros instructores explicar los estudios de imagen que aparecían en las diapositivas y de repente escuchó a otro de los pasantes hablar.

-Que participen los nuevos – 

Jae Joong se hizo chiquito en su asiento cuando nadie habló. Entonces volteó de la manera más discreta que pudo hacia la fila de al lado, en donde estaba el pasante que había hablado segundos atrás, tan solo para darse cuenta que justo detrás de él estaba sentado YunHo.

“Maldición, ¿A qué hora llegó?” fue lo único que pudo pensar Jae Joong y regresó su vista al frente cuando cruzaron miradas por medio segundo.

-¿Se encuentra MinHo? – preguntó el pasante de nuevo con la lista de instructores en la mano esta vez. 

No hubo respuesta. 

“Por favor que no diga mi nombre” pensó Jae Joong cruzando los dedos porque había mirado la lista en donde estaban todas las personas cuyo nombre empezaba con J.

-¿Jae Joong? – 

“Maldito” pensó por unos segundos y levantó la mano un poco solo para decir quedito 

-Aquí estoy – 

El instructor que estaba dirigiendo la sesión le dio el apuntador láser y apareció frente a él una radiografía de tórax, los nervios por su examen, por no haber estudiado bien las imágenes de esa sesión y sobre todo por querer quedar bien frente a YunHo le ganaron y terminó explicando muy poco. Entregó el apuntador al siguiente instructor y se agachó aún más en su asiento. Se sentía avergonzado no solo por haber quedado como un tonto frente a YunHo, sino también frente a sus compañeros de semestres superiores con más experiencia.

Sin pensarlo le envió un mensaje a YooChun

“Qué vergüenza YooChun, me hicieron explicar radiografía de tórax y no supe que decir, y lo peor de todo es que YunHo me estaba viendo, estoy seguro de que el otro pasante me mencionó a propósito” 

Jae Joong estaba casi seguro que Jimin, quien mencionó su nombre para participar, lo había hecho a propósito. Jimin era uno de los mejores amigos de YunHo y probablemente ya sabía todo lo que sucedía entre ellos.

“Ay Jae, seguramente te pusiste nervioso, no es que no sepas, después de todo por algo fuiste aceptado en ese departamento, no te preocupes” le respondió YooChun

Intentó concentrarse en el resto de la sesión sin mucho éxito, a veces Jae Joong solía ser muy duro consigo mismo, sobre todo en lo académico, y se estaba comenzando a cuestionar si realmente merecía estar en ese departamento como instructor, si realmente tenía la capacidad de dar clase y apoyar a otros alumnos.

Su teléfono volvió a vibrar y Jae Joong lo desbloqueó de inmediato. 

Era un mensaje de YunHo.

“No te pongas nervioso” junto con un emoji mostrando la lengua.

“Dios mío” pensó Jae Joong y si no hubiera sido porque estaba en el auditorio con sus compañeros, hubiera empezado a bailar ahí mismo de la felicidad.

No sabía que contestar, así que solo puso “ups”

Dejó de nuevo su celular en la paleta de su asiento y puso atención con más ganas esa vez. 

Después de unos minutos se dio por terminada la sesión de esa semana, quedando quince minutos en lo que comenzaba su clase de práctica con su grupo de los viernes. Se puso de pie algo nervioso, vigilando de reojo los movimientos de YunHo mientras guardaba sus cosas en la mochila y sacaba algunas otras para echarlas en las bolsas de su bata e irse a su clase. Pudo ver mientras hacía esto que los pasantes que estaban sentados en esa fila se habían levantado de su lugar y habían caminado hacia el frente del auditorio, pero YunHo no, él tan solo había salido al pasillo que dividía la fila de asientos donde él se encontraba y en la que estaba Jae Joong. 

Jae Joong se echó su mochila al hombro y salió al pequeño pasillo también, volteando a ver a YunHo justo en el segundo en el que él bajó unos escalones para acercarse y saludarse con la mano.

-Hola – dijo YunHo 

-Hola – dijo también Jae Joong.

-¿Cómo estás? – preguntaron ambos al mismo tiempo y Jae Joong su rostro ruborizarse.

-Bien y ¿tú? – respondió primero Jae Joong

-Bien, bien – dijo casi al mismo tiempo YunHo.

Se quedaron en silencio unos segundos y YunHo preguntó.

-¿Ya te anotaste en la lista? – Ambos voltearon hacia el escritorio en el frente del auditorio donde había varios instructores amontonados para marcar su asistencia.

-Sí, desde que llegué – dijo el pelinegro y sonrió. Notó que YunHo estaba demasiado apenado para saber que decir y como él estaba muy nervioso también decidió despedirse en ese momento, estaba feliz de poder saludarlo de forma más cercana esta vez, era la primera vez que lo hacían desde que habían empezado a hablar por mensajes – Bueno… tengo clase, hasta luego – le tendió la mano y después de estrecharla con timidez salió del auditorio, sintiendo su corazón latiendo más rápido de lo normal y su cara sumamente caliente y roja.

Fue muy feliz a dar su clase de rayos de ese día, incluso sentía que sus alumnos se darían cuenta de que se encontraba más feliz de lo normal, pero no le importaba, porque realmente estaba feliz a pesar de solo haber intercambiado unas palabras con Jung YunHo. 

Lo único que terminó de hacer ese día perfecto fue cuando al salir de su clase una hora y media después e ir caminando junto con sus compañeros instructores de vuelta a la oficina para dejar las carpetas y la laptop del departamento, fue sacar su teléfono que había tenido guardado en su bata todo ese tiempo para encontrar entre los mensajes de YooChun y de otros amigos de su ciudad natal, un mensaje de Jung YunHo que decía 

“No había notado que tienes voz agradable”


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Jae Joong se dio cuenta pronto de que YunHo era alguien de quien podría enamorarse. Sin embargo, no estaba buscando una relación en esos momentos. 

Le emocionaba lo que tenía con YunHo, la atención que le daba y las conversaciones interesantes que mantenían por mensajes, pero le seguía pareciendo raro e incluso un poco frustrante como YunHo se desaparecía por días y luego le hablaba como si nada hubiera sucedido. Se repetía que probablemente el pasante solo estaba nervioso o estresado estudiando para su examen para entrar a la especialidad, pero eso no quitaba el hecho de que en ocasiones esa actitud lo fastidiaba. 

Odiaba sentir que le rogaba a las personas para que le pusieran atención, y con YunHo esa ansiedad solo crecía. Un día Jae Joong decidió invitarlo a salir y Yunho respondió:

“No sé exactamente que es lo que busques, no quiero ser grosero pero tienes muy poco de conocerme, salí hace pocos meses de una relación que duró 2 años, ahorita no es el mejor momento, espero entiendas y espero seamos amigos”

Ni siquiera lo había invitado a una cita romántica, con velas y flores, como para que respondiera tan a la defensiva, para empezar nunca se habían visto fuera de la escuela, lo único que buscaba era conocerlo fuera del ámbito de la escuela y poder tener una conversación real con él. Pero después de ese mensaje, Jae Joong solo se desanimó y decidió no volverlo a tomar en serio. 

Pero para su sorpresa, un sábado de abril por la noche se encontraba solo en su departamento, haciendo una clase, tomando alcohol y hablando con YooChun mientras escuchaba música, cuando la canción que se estaba reproduciendo fue interrumpida por unos segundos con la llegada de un mensaje. Tomó su celular y encontró un “Hola” por parte de YunHo. Intercambiaron algunos mensajes y continuó trabajando, tan solo para darse cuenta unas horas después que nunca recibió una respuesta.

“Seguro se quedó dormido” pensó Jae Joong mientras seguía escribiendo y se acababa su botella de cerveza. Cerró su laptop después de unas horas y apagó la luz para poder irse a dormir. 

Normalmente no escuchaba los mensajes que llegaban a su teléfono cuando estaba dormido, era conocido por tener sueño pesado, pero una notificación de YunHo lo despertó por la mañana en donde tenía escrito “Me quedé dormido” y seguido de eso un mensaje de “Buenos días” y el link para una canción más en YouTube. 

Jae Joong se levantó unas horas después y respondió esos mensajes y comenzó a prepararse de desayunar después de bañarse, para poder empezar su día de estudio. Ese semestre pintaba a ser especialmente pesado por la cantidad de exámenes que tenían. Mentiría si dijera que no estaba estresado por la frecuencia de las pruebas y la cantidad de temas que tenía que estudiar, pero aun así lo disfrutaba, le gustaban sobre todos los fines de semana en los que podía levantarse temprano y estudiar sin interrupciones. 

Las únicas pausas que tomó ese día fueron para responder los mensajes de YunHo, los cuales sorprendentemente llegaban seguido ese día. La mayoría eran mensajes sin mucha importancia, hablando de los temas que veía en clase, de sus exámenes, del curso de YunHo, de sus amigos, pero un mensaje en particular tomó por sorpresa Jae Joong y casi suelta su celular.

“Te ves bien en la foto” 

Jae Joong casi se ahoga con su café en ese momento. Jae Joong suponía que YunHo lo encontraba atractivo, pero no esperaba recibir un mensaje tan directo.

Ni siquiera le respondió en ese instante a YunHo, entró al chat con su mejor amigo y le envió en mensaje de audio lo que había sucedido, sobre todo para que YooChun pudiera notar la emoción en su voz solo por recibir un pequeño mensaje como ese y después le envió una captura de pantalla en donde aparecía el mensaje. 

“Muchas gracias” respondió ahora si el joven al cumplido. 

Después de ese día en el que hablaron por muchas horas, Jae Joong siguió recibiendo mensajes de YunHo todos los días, pasaron de hablar cada 3 o 4 días a la semana a platicar todos los días, como muy buenos amigos, enviándose fotos graciosas, videos e incluso jugando. Jae Joong estaba seguro de le gustaba a YunHo, a pesar de que aún no le decía nada que le diera más indicios de ello después del comentario sobre su foto de perfil. 

A la semana de haber empezado a hablar de esa manera, Jae Joong estaba hablando con YooChun mientras hacía de comer

-YooChun-ah, creo que YunHo quiere invitarme a salir – 

-¿Por qué lo dices? – 

-Porque van dos días seguidos que me pregunta “¿Qué harás hoy?”, ayer cuando fui al cine con Siwon y hoy que iré a Protección Civil con mi grupo de primeros auxilios – 

-Estúpido, dile que no tienes nada que hacer – lo regañó YooChun. 

-No, él ya me rechazó una vez y por eso yo ya no le volví a preguntar nada, si realmente quiere salir conmigo, tendrá que preguntar una tercera vez y esta vez sí estaré disponible, además ya tenía planeado ir a esta guardia desde hace semanas – dijo decidido Jae Joong. Si hubiera sido el Jae Joong de hace unos años, quizás hubiera cancelado todos sus planes para salir con ese chico, pero el Jae Joong de ahora, que no ponía primero el amor después de salir lastimado de su última relación, tomaría las cosas con calma y esperaría a que el otro hombre insistiera más. 

Como si hubiera leído su mente, YunHo le envió un nuevo mensaje 

“¿Estás libre mañana?”

Jae Joong sintió su cara caliente y YooChun le arrebató el teléfono antes de que pudiera responder. 

-¡Yah! – gritó Jae Joong intentando, en vano, recuperar su teléfono. YooChun era ligeramente más alto que él y muy bueno en karate, tan pronto como se quiso acercar, su amigo ya tenía un pie contra su pecho para mantenerlo lejos. -¿Qué haces? – 

-Asegurándome de que te cases con este hombre, dijiste que estarías disponible la tercera vez que te quisiera invitar, esta es la tercera – 

-Okay, déjame ver – YooChun le aventó de regreso el celular y Jae Joong leyó su “propio” mensaje. 

“Espero que salir contigo” 

“Es una cita” 

Aquello fue lo último que recibió de YunHo antes de irse a su guardia en protección civil. 


Jae Joong regresó a su departamento agotado pero feliz a su casa a la mañana siguiente. Tener una guardia como paramédico le recordó mucho a su tiempo en la preparatoria cuando era voluntario en la delegación de su ciudad. Si bien el área que le tocó cubrir en esta ocasión era muy diferente a lo que solía hacer en Gong-ju, eso no le impedía sonreír de oreja a oreja por estar aprendiendo cosas nuevas y por saber que se estaba desarrollando en áreas en las que no podría haberlo hecho si se hubiera quedado en su pequeña ciudad. 

Después de bañarse y desayunar decidió dormir unas horas. YunHo sabía que estuvo despierto casi toda la noche pero aun así no quería verse tan cansado frente a él ahora que por fin tendrían una cita. En el transcurso de la tarde y parte de la noche estuvo recibiendo mensajes del pasante y acordaron verse en una cafetería relativamente cercana a la facultad. 

-¿Estás listo para tu cita? – preguntó YooChun al entrar horas después al cuarto de Jae Joong. Sin pedir permiso comenzó a revisar el closet de su amigo para elegir su ropa. 

Jae Joong se levantó sintiéndose más cansado que cuando recién llegó a su casa. 

-Eso creo – 

-¿Cómo que eso crees?, tienes que verte feliz por esto, te conseguí una cita con el hombre que te gusta – sacó una camisa y un pantalón de mezclilla y los lanzó a la cama a un lado de Jae Joong – Anda ve a lavarte la cara y te maquillaré un poco para taparte esas ojeras – lo levantó a la fuerza de la cama y lo empujó hasta el baño. Jae Joong sonrió frente al espejo del baño después de lavarse la cara y cepillarse los dientes. Por una parte estaba muy emocionado de por fin salir con YunHo, pero por otra, estaba sumamente nervioso por la cita. Sus conversaciones por mensajes eran buenas, YunHo siempre hablaba de temas interesantes, pero era todo lo contrario cuando hablaban en persona. 

“Espero que solo esté nervioso igual que yo” pensó. 

Justo como prometió, YooChun se encargó de arreglarlo y cuando se vio al espejo después de peinar su cabello y aplicar un poco de corrector sobre sus ojeras le gustó mucho la imagen que reflejaba. 

Recibió un mensaje de YunHo.

“Hola, ¿Cómo estás? ¿Ya estás listo?, te veo en una hora” 

-¿Y si no le gusto? – preguntó Jae Joong cada vez más nervioso.

-No pasa nada – lo tomó de los hombros para darle la vuelta y verlo a los ojos. – Solo sé tu mismo, si no es el indicado no pasa nada, tienes 21 Jae, hay tiempo y eres una persona atractiva y de buen corazón, no tendrás problema en encontrar a tu hombre perfecto – 

Jae Joong suspiró y tomó las palabras de YooChun con su corazón. 

-Gracias Chun – 

-Ve y diviértete – se abrazaron y Jae Joong salió de su cuarto. 


Jae Joong llegó a la cafetería a la hora acordada y vio a YunHo bajando de su auto a unos cuantos metros. Sonrió y lo saludó desde donde estaba, sintiendo su corazón latir más rápido con solo verlo. 

-Hola, ¿Cómo estás?, ya quería verte – lo saludó YunHo y lo abrazó. Jae Joong dudó por un segundo y correspondió el abrazo. 

-Hola YunHo-ah, yo también – Se soltaron y sonrieron. 

YunHo abrió la puerta de la cafetería y dejó a Jae Joong entrar primero. El lugar no tenía tanta gente como de costumbre por lo que pudieron elegir la mesa que quisieron. Tomaron una cerca de la ventana que daba hacia la calle, la vista era agradable en primavera. Ordenaron dos cafés y postres para compartir y la tensión se esfumó en cuanto YunHo empezó la plática. 

-Cuéntame que tal estuvo tu guardia – dijo YunHo, sostenía la taza cerca de sus labios y daba sorbos pequeños mientras hablaba con Jae Joong.

-Estuvo muy interesante, la verdad nunca había estado en el área de rescate urbano, yo solía cubrir solo primeros auxilios – 

-¿Eres paramédico? – 

-Lo era, en la preparatoria – 

-Oh, ¿entonces estudiaste eso antes de venir a Seúl? – 

-Algo así, no tomé la carrera técnica, solo fue un voluntariado en mi ciudad, gracias a eso supe que mi vocación era ser médico – 

YunHo asintió y tomó otro tanto de su café, se miraba sorprendido con todo lo que platicaba y eso lo emocionaba. Jae Joong tomó un pedazo del pastel de chocolate que tenían en el centro de la mesa.

-¿Y qué más haces? – preguntó YunHo. 

-¿A qué te refieres? – 

-Pues rescate urbano, paramédico, instructor de rayos, ¿Hablas otro idioma?, ¿Practicas algún deporte? – 

Jae Joong sonrió apenado y desvió la mirada unos segundos antes de volver a fijar su mirada en la de YunHo, quien no podía dejar de sonreír mientras esperaba su respuesta. 

-Estudio japonés y estoy en el equipo representativo de Tae Kwon Do - 

-¡Wow! – 

-¿Qué? – 

-Eres toda una cajita de sorpresas Jae Joong-ah – 

Jae Joong sintió su sonrojo extenderse hasta su cuello. 

Él sabía que hacía demasiadas cosas, y era consciente que por eso sentía que el semestre estaba aún más pesado de lo que ya era, pero amaba todo lo que hacía y siempre lo contaba con orgullo, pero sobre todo, cuando se lo contaba a alguien siempre había esperado la reacción que tuvo YunHo, en donde le demostraban que era sorprendente todo lo que hacía en lugar de intentar hacerlo sentir sin valor alguno. 

Hablaron tanto durante esa primera cita que no sintieron las horas pasar. Platicaron sobre sus familias, sus gustos, aspiraciones profesionales, sus amigos y sus ciudades de origen. Jae Joong se sorprendió cuando YunHo dijo que su sueño era ser neurocirujano. Él quería ser oncólogo. 

-Suena muy pesado neuro – dijo Jae Joong, su taza de café ya vacía y comiendo el último bocado del pastel, que YunHo insistió en que tomara. 

-Lo sé, todo mundo me lo ha dicho, pero honestamente no me ha llamado nada la atención tanto como neurocirugía, por eso quiero hacerlo, además, es muy interesante – 

-Si lo es, me gusta neuro, pero no creo ser tan fuerte para aguantar esa especialidad, por eso me sorprendes – 

-¿Crees que lo logre? – preguntó YunHo, la duda reflejada en sus ojos. Jae Joong sabía que eran esos momentos en los que uno realmente se ponía a reflexionar sobre sus sueños y decisiones. Elegir una especialidad no era cualquier cosa, era elegir que vas a hacer por el resto de tu vida, por lo que entendía a la perfección de donde surgía ese miedo e inseguridad. 

-Por supuesto que si – intentó transmitirle toda la seguridad que sentía por él. Podía dudar de muchas cosas, incluso de si mismo, pero no de YunHo, no después de hablar con él y escucharlo hablar con tanta pasión e ilusión sobre sus sueños. 

Solo esperaba poder estar a su lado para verlo cumplir todo.


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Notas: Me encanta estar practicamente contando dos historias en una sola, por lo general me gusta tener mis historias un poco menos revueltas, pero nuevamente, esto es importante para poder entender TODO lo que se viene después. 

Solo puedo decir que se preparen mentalmente porque el angst SE VIENE. 

Nos veremos el 05 de Noviembre porque IRE A JAPON!! (a tomar inspiración para los últimos capítulos que me falta escribir de esta historia que amo tanto y que precisamente se desarrolla en Tokio)

Si quieren saber que canción le mandó YunHo a Jae Joong: Rhye - Open


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martes, 8 de octubre de 2024

Broken: Capítulo 3

 


Capítulo 3

Presente.

Aún era de noche cuando Jaejoong abrió sus ojos. Su celular marcaba las 04:30 am. No recordaba el momento exacto en el que se quedó dormido, no era su plan dormirse con YunHo en su departamento, pero el cansancio acumulado por las guardias nocturnas de las últimas dos semanas, la sorpresa por reencontrarse con YunHo y su respiración tranquila cerca de su cuello, además del abrazo y la forma en la que YunHo apretaba su cintura, le hicieron imposible la tarea de quedarse despierto. 

Con cuidado movió el brazo que lo envolvía y se levantó de la cama. Caminó en silencio hacia el baño y observó su reflejo en el espejo una vez encendió la luz. Frente a la luz blanca Jae Joong pudo apreciar lo marcadas que estaban sus ojeras a pesar de intentar cubrirlas con corrector. Se quedó en silencio observando su reflejo con una mano en su pecho, su corazón latía muy rápido y fuerte, se sentía ansioso. 

-Tranquilízate Jae Joong, pronto se irá y estaremos en paz de nuevo – se dijo a si mismo en un intento fallido para calmar su corazón. 

Se lavó la cara para refrescarse un poco y regresó a su habitación, encontrando a YunHo sentado al pie de la cama. 

-Despertaste – Fue lo único que pudo salir de su boca. Se dio una cachetada mental por mencionar lo obvio en vez de decir algo más. 

-Si… - YunHo se puso de pie y se acercó lentamente a Jae Joong. Este se quedó inmóvil en la puerta del cuarto esperando que hablara de nuevo ya que él se sentía incapaz de mantener una conversación en ese momento, pero YunHo no dijo más. Cuando estuvo lo suficientemente cerca, tanto que podía sentir su aliento chocar contra su frente, cerró sus ojos y sintió una de las manos de YunHo sobre su hombro – Ya me voy, vuelve a dormir – 

Jaejoong abrió los ojos y se dio la media vuelta, siguiendo con la mirada a YunHo. Su ex esposo lo volteó a ver una última vez antes de abrir la puerta de su departamento y salir. Jaejoong pensó que la presión en su pecho se aligeraría después de verlo partir pero no fue así, de hecho se sentía más confundido y agitado ahora que por fin estaba solo. ¿Por qué cerró ojos ojos cuando YunHo se acercó?, ¿Qué estaba esperando de él?, ¿Y por qué en el fondo se sintió decepcionado de haber recibido solo una palmada en el hombro?. Jae joong pasó una mano por su cabello, soltó un largo suspiro y se volvió a acostar con la esperanza de dejar esos pensamientos de lado y poder conseguir al menos unas horas de sueño.


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Jae Joong llegó el día siguiente al hospital con su bata colgando en su brazo derecho y un termo con café en su mano izquierda, entró saludando a todos como era su costumbre y fue hacia los vestidores para dejar su mochila con su ropa en su casillero y cambiarse a su uniforme clínico azul marino. A pesar de haber dormido pocas horas las últimas dos noches, se sentía con energía para poder iniciar su turno. Ya con su bata puesta y las cosas necesarias en sus bolsillos fue a la estación de enfermería a tomar una Tablet y empezar a revisar los pendientes de ese día. Estaba tan concentrado y relajado esa mañana porque la sala de urgencias estaba casi vacía, pocas veces sucedían esas cosas, tan solo había dos pacientes que estaban siendo atendidos por internos. Tan inmerso se encontraba en su café que no se dio cuenta del momento en el que se aproximaron a él hasta que sintió la respiración de alguien más encima de su cuello, haciéndolo voltear sorprendido hacia atrás. 

-¿Por qué tan asustado?, no soy un desconocido – dijo YunHo cuando Jae Joong volteó sorprendido.

-¿Qué haces aquí? – Desvió la mirada hacia su tableta - ¿No tienes que trabajar? – dijo mientras pretendía hacer cosas en el dispositivo.

-Claro – 

-¿Entonces?  - lo miró y alzó la ceja derecha - ¿Qué haces aquí?, ¿No deberías estar en tu trabajo? – 

-Aquí estoy – sacó de su mochila su gafete del hospital y Jae Joong se quedó sin palabras. 

-¿Qué? – dijo después de unos segundos.

-Seremos compañeros de trabajo – le guinó el ojo y se dio la media vuelta, tan solo alzando su mano a modo de despedida mientras avanzaba hacia los elevadores, pero Jae Joong se levantó de su asiento y rápidamente lo alcanzó y lo detuvo tomándolo del brazo. 

-Tienes que estar bromeando – 

-¿Por qué lo haría?, ayer cuando entramos juntos a cirugía con el paciente del hematoma epidural ya había sido aceptado para trabajar en el hospital como nuevo adscrito de neurocirugía, pero mi primer día oficial es hoy, solo que quise darme una vuelta para conocer el hospital, ya sabes  - explicó YunHo a un perplejo Jae Joong – Y resultó que no tenían cirujano de guardia y ambos sabemos la urgencia que representa una lesión de ese tipo, por eso me ofrecí para realizar la cirugía – 

-¿De verdad?, ¿Eso es lo que usarás como excusa para tu actitud irresponsable e impulsiva al llegar a operar a un paciente que no era tuyo?, estoy seguro de que ni siquiera habías firmado nada aún – 

-No es ninguna excusa, realmente vine a ver el lugar, sabes que me gusta estar preparado y conocer mi lugar de trabajo, no soy tan irresponsable e impulsivo como para querer meterte en problemas, solo nadie más sabía que ya era un empleado oficial en ese momento – le revolvió el cabello después de decir eso y se retiró.

Jae Joong suspiró molesto y se acomodó el cabello. No podía creer, o más bien no quería creer aún lo que YunHo le acababa de decir hace unos segundos. Precisamente para alejarse de él había viajado a Japón, aprovechando su cambio de especialidad y sus contactos en aquel país donde había estado un tiempo de intercambio en sus años de estudiante de pregrado.

Esta sería la primera vez trabajando juntos, como iguales. Muchos años antes, cuando Jae Joong aún era estudiante y recién inició su internado, pudo trabajar con YunHo un tiempo, quien en ese entonces ya era residente de cirugía, pero una vez que Jae Joong se graduó y eligió especializarse en Oncología, sus caminos se separaron. Ahora, a pesar de que Jae Joong estaba consciente de que cada quien estaría trabajando en sus respectivos servicios y ahora tenía la misma autoridad que YunHo, una parte de él estaba pensando en todas las razones por las cuales tener a su ex esposo trabajando en el mismo hospital que él era una pésima idea. 

La primera y más importante de todas era que por más que quisiera evitar a YunHo, siendo urgenciólogo implicaba interconsultar con neurocirugía casi diario, múltiples veces al día.

La segunda era que YunHo le ponía los nervios de punta. Pero eso no lo admitiría jamás en voz alta.

La llegada de nuevos pacientes lo sacó de sus pensamientos. Se mantuvo inmerso en su trabajo durante toda la mañana, enviando pacientes a los distintos servicios y atendiendo por su cuenta a los que eran verdaderas emergencias. Escaneó por unos segundos toda el área, viendo como tanto médicos internos, como residentes y personal de enfermería iban de un lado a otro encargándose de todos los pacientes que llegaban y sonrió satisfecho. El ambiente en urgencias era pesado y podía ser un desastre la gran mayoría de las veces, pero el trabajo se estaba llevando a cabo de una manera estupenda ese día y por eso sonrió debajo de su cubrebocas mientras seguía revisando al paciente que tenía en frente.

Cuando por fin tuvo un momento para respirar fue por algo rápido de comer y poder regresar a trabajar, el piso seguía lleno pero la mayoría de los pacientes habían sido estabilizados, por lo que se sintió tranquilo dejando el servicio a cargo de sus residentes por unos minutos.

Llegó a la cafetería y en cuanto entró vio a YunHo llegando también por la entrada del otro extremo y se apresuró en tomar un sándwich y un jugo para salir de ahí y evitar topárselo, suficiente tenía con haberlo visto hace unas horas y su cabeza aún no asimilaba que tendrían que convivir más. Cuando tomó sus cosas prácticamente corrió hacia la sala de descanso, esperando que YunHo se quedara en la cafetería. Se sentó en una de las sillas y dejó sus lentes sobre la mesa, masajeando el puente de nariz y cerrando sus ojos, el silencio en ese lugar le venía muy bien después de todo el alboroto tanto en urgencias como en la cafetería. Estaba por tomar su primer bocado cuando la puerta se abrió y entró YunHo, quien fingió sorpresa al ver a Jae Joong sentado y se sentó en la silla frente a él.

-¿Puedes dejar de seguirme? – espetó Jae Joong con fastidio.

-Uy perdóname, señor soy el centro del universo, no sabía que la sala de descanso era exclusiva para ti – respondió con sarcasmo YunHo y empezó a comer. 

Jae Joong suspiró pero no se movió de su lugar, tan solo decidió ignorar la presencia de Yunho y comer su almuerzo.

-Jae Joong-ah – habló YunHo. 

Silencio.

-Jae Joong-ah – repitió su nombre y de nuevo fue ignorado. –Oh vaya, no pensé que fueras tan infantil – 

-Creo que dejé muy claro desde que pusiste un pie en este hospital que no quiero verte – 

-Sin embargo nos besamos en tu departamento – dijo en voz baja y mirando con una sonrisa como las mejillas del otro médico se volvían rojas.

-Eso es algo que no volverá a pasar – desvió la mirada.

-¿Entonces te arrepientes? Porque yo lo disfruté mucho – se acercó YunHo a Jae Joong apoyándose en la mesa en el instante en el que Jae Joong volteaba a verlo para responder y se dio cuenta que sus rostros ahora estaban demasiado cerca. Se inclinó hacia atrás pero no pudo alejarse mucho o caería al suelo con todo y la silla, YunHo aprovechó esto para inclinarse más sobre el lugar del urgenciólogo y susurrar muy cerca de sus labios. –Y me dio la impresión de tú lo disfrutaste también – 

-Eh… estaba borracho –Jae Joong desvió la mirada de los ojos marrones de YunHo,  que lo único que reflejaban en ese momento eran ganas de besarlo.

-Estás titubeando… y conozco tu cuerpo a la perfección – se acercó a su oído – Jae Joongie – lo llamó por ese apodo soltando más aire del necesario a propósito para que el pelinegro sintiera su respiración en su oreja y se estremeciera, lo cual sucedió justo como planeó porque lo sintió temblar cerca de él. 

-Yo no estaría tan seguro si fuera tú – recobró la compostura y colocó ambas manos sobre el pecho del cirujano para empujarlo de regreso a su lugar – Han pasado muchos años desde que nos separamos, ¿No crees que si quisiera regresar contigo lo hubiera hecho hace mucho tiempo? – 

-Por favor Jae Joong, no quieras intentar engañarme con ese cuento de que te desenamoraste de mi, ni siquiera hablaré de nuestro beso, si realmente no te gustara no me hubieras permitido entrar a tu departamento o invitarte a cenar – su voz juguetona desapareció para tornarse seria. Jae Joong lo notó y de inmediato cambió su semblante. Se puso de pie sin decir nada esperando que YunHo entendiera que esa era su señal para que lo dejara en paz. Lo menos que quería era discutir con YunHo en su lugar de trabajo. 

YunHo lo siguió hacia la puerta y lo tomó del brazo antes de que pudiera salir, justo como Jae Joong había hecho con él en la mañana. El urgenciólogo intentó soltarse pero YunHo lo sostuvo con más fuerza, casi lastimándolo, pero no hizo ningún ruido. 

-La única razón por la que no estás conmigo es porque eres un terco y solo huiste del problema, y estoy seguro de que aún lo haces - 

Precisamente por eso no quería volver a toparse con YunHo, porque cada vez pasaban el suficiente tiempo a solas terminaban discutiendo por el mismo tema, aquello que los había hecho separarse, por lo que YunHo lo culpaba y Jae Joong ya se había cansado de intentar explicar. 

-Al parecer no soy el único terco aquí – 

-Al menos yo estoy tratando de luchar por nosotros – 

-No hay un nosotros desde hace mucho – Jae Joong se arrepintió de inmediato al decir aquello pero ya no podía deshacer el daño. YunHo aflojó su agarre y Jae Joong aprovechó para soltarse por completo, arreglar su bata y caminar hacia la salida. 

-Anda, sal corriendo como siempre – dijo YunHo

-Cuando realmente estés dispuesto a entender lo mucho que me lastima esta situación, hablamos. – dijo Jae Joong con un dejo de dolor - Parece que no soy el único que se quedó estancado en el mismo lugar. Tú sigues sin entenderme.

-Oh claro que lo entiendo Jae Joong – le contestó YunHo. - Pero no tenías que alejarte de mí para manejar tu dolor. No solo era tu dolor, era de ambos… es de ambos – 

-No quiero hablar de esto de nuevo YunHo, no debiste venir aquí, sea la razón que sea, debiste quedarte en Seúl – Abrió la puerta y justo antes de salir escuchó la voz de YunHo.

-No eres el único que sufre viviendo en la ciudad donde murió tu hijo – 

Jae Joong salió furioso de la sala de descanso. Cruzó la primera puerta que vio que dirigía hacia las escaleras y agradeció que se encontraban vacías en ese momento, necesitaba respirar a solas un momento para poder aguantarse las ganas de llorar. Se sentó en uno de los escalones y se tapó la cara con las manos, quedándose unos momentos solo respirando y tratando de calmar su acelerado corazón. 

-¿Está bien? – escuchó una voz masculina hablarle en coreano. Jae Joong alzó la vista de inmediato y vio a Changmin, uno de sus internos que estaba de intercambio ese año. Negó suavamente con la cabeza y Changmin dudó un momento antes de acercarse y ofrecerle un pañuelo. – Lo escuché discutir con el doctor Jung – confesó el joven médico. 

-Oh – tomó el pañuelo y se limpió las lágrimas. 

-No fue a propósito, estaba buscándolo para una interconsulta y me dijeron que estaba descansando… – comenzó a decir rápidamente Changmin

-No te preocupes, siento que hayas tenido que escucharnos discutir – se levantó y respiró hondo - ¿Nos escuchó alguien más? – 

Changmin negó con la cabeza y Jae Joong solo asintió sin decir más. Respiró hondo unas cuantas veces para intentar calmarse y después de agradecer una vez más a Changmin por el pañuelo, se fue a seguir trabajando. 

Sumergirse en el trabajo, justo como lo había hecho YunHo, era la única manera para evitar dejarse caer en la depresión.



Changmin regresó por donde había llegado y fue a la sala de descanso donde aún se encontraba el doctor Jung.

Dudó por unos segundos en si debía entrar a la sala pero algo dentro de él le decía que debía hacerlo. Se asomó lentamente por la puerta y vio al doctor Jung con los codos apoyados en la mesa y su cara escondida entre sus manos. Decidió acercarse y hablando en coreano le preguntó.

-¿Se encuentra bien, Doctor Jung? – 

-Si, solo necesito unos minutos – 

-Está bien – dijo Changmin, sentándose en uno de los sillones. No pasaron ni cinco segundos cuando YunHo volteó a verlo con sorpresa, por fin había hecho click que le había hablado en su idioma natal y no en Japonés.

-¿Eres coreano? – le preguntó sorprendido.

-Si – 

-¿Qué tanto escuchaste? - pasó una mano por su cabello, echando los mechones que caían por su frente hacia atrás. - Pensé que nadie nos entendería al discutir en otro idioma.

-Solo escuché el final, estaba por entrar cuando el Doctor Kim salió… – 

-Oh, bueno chico, lamento que nos hayas escuchado. – Se disculpó YunHo con una sonrisa incómoda -  No planeaba hablar de ello con Jae Joong. No en el hospital, al menos. 

-Disculpe la pregunta… - habló nervioso Changmin. Sentía curiosidad desde que YunHo se presentó como el ex-esposo de Jae Joong – su discusión... ¿tiene que ver con la razón por la cual el doctor Kim se cambió de especialidad? 

YunHo suspiró. 

– No sé qué tanto sepas de Jae Joong, pero Urgencias no era su área de fortaleza. -Dudó un segundo– No quiero decir que no sea bueno en lo que hace, Jae Joong es un excelente médico. Yo lo admiro mucho. 

Se quedó en silencio un momento y Changmin pudo notar un gesto de nostalgia en el rostro de YunHo. Le sorprendió que el doctor le respondiera una pregunta tan personal. Intuía que YunHo necesitaba desahogarse y se quedó en silencio para permitírselo. 

-Sin embargo, su fuerte siempre fue Oncología - continuó con una sonrisa triste. -Por algo fue su primera opción cuando se graduó de la carrera 

Changmin se quedó callado, esperando que YunHo dijera algo más, pero el mayor solo suspiró y se puso de pie, se alisó la bata y le dio unas palmadas en el hombro antes de salir. 

-No menciones nada de esto a nadie, por favor. No quiero más problemas con Jae Joong… más de los que ya tenemos.

Nadie en ese hospital sabía las razones por las cuales Jae Joong había decidido vivir en otro país, porque tenía dos especialidades y solo ejercía una. No sería YunHo quien revelara esa información. Después de todo, él tampoco hablaba de ese tema que lo hacía llorar con tanta intensidad como el primer día.

YunHo cerró la puerta tras de sí, dejando a Changmin aún con mas preguntas. 


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Notas

En verdad amo los capítulos de la actualidad. Hay tanta tensión e historia entre YunHo y Jae Joong que poco a poco vamos a ir entendiendo. 

Espero hayan disfrutado este capítulo. Como todos, disfruté mucho escribirlo. 

Nuevamente mil gracias Arantxa por betear conmigo este capítulo, fue la mejor cita en Starbucks, hablando de shinkis, fanfics y YunJae. 

Nos vemos la siguiente semana :)


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martes, 1 de octubre de 2024

Broken: Capítulo 2

 


17 años antes.

Jae Joong echó su cabello hacia atrás para dejar su frente libre, se quitó los lentes por un momento y masajeó el puente de su nariz con los ojos cerrados por unos segundos. Sintió que alguien lo observaba y abrió los ojos para ver a un chico de cara pequeña, cabello corto castaño oscuro peinado hacia atrás y con lentes de montura gruesa observarlo. 

Al sentirse descubierto el joven desvió la mirada de vuelta a su libro y Jae Joong volvió a colocarse sus lentes para seguir estudiando. Presentaba examen de Farmacología en unos días y no se sentía del todo listo a pesar de que ya había leído los fármacos y sus indicaciones dos veces. Volteó a ver al muchacho que lo había estado observando de nuevo y lo atrapó haciendo lo mismo así que extrañado y con un sonrojo en sus mejillas bajó su mirada a sus notas y se concentró solo en eso.

-Hyun Joong-ah – le habló Jae Joong a su amigo que estaba sentado al lado de él.

-¿Qué pasó? – preguntó sin despegar su vista de su cuaderno.

-Me acaba de pasar algo extraño – 

-¿Qué?, solo estamos sentados en la biblioteca – Hyun Joong cerró su libreta y ahora si puso toda su atención en su Jae Joong. 

Justo en ese instante, el chico que había estado observando a Jae Joong se levantó  y caminó fuera de la sala. Jae Joong lo siguió con la mirada y dijo en voz baja

-Ese chico de allá, se me ha quedado viendo dos veces – 

Hyun Joong volteó hacia la entrada de la biblioteca y solo pudo ver la espalda del muchacho del que hablaba Jae Joong.

-¿Y? – 

-No es solo cuando alguien te mira y lo sorprendes haciéndolo y ya desvían la mirada y no te vuelven a mirar jamás… Sentía el peso de su mirada, y lo atrapé dos veces haciéndolo – Jae Joong no quería darle mucha importancia, incluso él se sentía algo tonto hablando de esto con su amigo. Muchas veces antes ha cruzado miradas con otras personas en la facultad, muchas veces alguien le ha parecido atractivo y muchas veces alguien lo ha volteado a ver más de una vez, así que realmente no sabía que era lo que hacía a este chico especial como para que Jae Joong quisiera platicarlo.

-¿Y tú que hiciste? – preguntó Hyun Joong ahora con una sonrisa. 

-Desvié la mirada obviamente, no lo conozco – sintió su cara calentarse al instante, si antes no se sentía como un completo tonto, ahora después de ver la reacción de Hyun Joong si lo hacía. 
-Eres un tonto – dijo en tono de regaño Hyun Joong.

-¿Por qué? – preguntó ofendido Jae Joong.

-Hubieras mantenido el contacto visual – 

-Qué vergüenza – 

-No, mira tal vez fue una coincidencia, pero si vuelves a topártelo en serio sigue mi consejo, sostenle la mirada y ya veremos qué pasa - 

Jae Joong se quedó pensando en eso y decidió hacerle caso a su amigo, decidido al 100% de que la siguiente vez que llegara a cruzar miradas con ese chico mantendría el contacto visual.

---

Realmente no tuvo que esperar mucho tiempo para tener que poner en práctica el consejo de Hyun Joong, porque dos días después Jae Joong se encontraba caminando por el hospital hacia el departamento de Imagen Diagnóstica con la carpeta del grupo al que le daba clase ese día y se encontró de nuevo con el joven que lo había observado en la biblioteca. 

Pensó por un instante en hacer caso omiso de su presencia y solo pasar en frente de él antes de entrar a la oficina pero sintió el peso de su mirada de nuevo y volteó a verlo. Ahora que lo veía más de cerca notó lo apuesto que era y sus bonitos ojos color café hicieron contacto visual con los suyos y se quedaron así por unos segundos hasta que dijo

-Hola – 

-Hola – respondió Jae Joong. Lo escaneó por medio segundo antes de abrir la oficina y notó el gafete que decía “servicio social”. 

“Así que es pasante, interesante” pensó Jae Joong.

Él estaba apenas a punto de terminar tercer año de medicina.

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Ahora que su subconsciente había desbloqueado esa nueva opción, Jae Joong no podía dejar de pensar en ese apuesto pasante, había algo en él que le atraía, la única explicación lógica en su mente era que le parecía guapo. Y cuando fue tanto el espacio mental que ocupaba, decidió contarle a Yoochun, su mejor amigo, sobre él.

-Hay un pasante muy guapo en Rayos – 

-¿Y le hablas? – preguntó con un tono insinuador que Jae Joong entendió perfectamente.

-No… bueno, solo nos saludamos cuando nos vemos, desde lejos – 

-Bueno, es mejor que nada, luego consigues una foto de él para que me lo enseñes – 

Él ya había encontrado su Facebook, pero no pudo ver ninguna de sus fotos porque tenía la privacidad activada para todo su contenido, tan solo podía ver la imagen de perfil.

“¿Debería agregarlo a Facebook?” Ese pensamiento cruzaba su mente seguido ese día, pero lo desechaba de inmediato porque no lo conocía, así que sería muy obvio que le gustaba y no quería ser descubierto tan fácil.

Ese día Jae Joong tenía que ir a la oficina de Imagen porque iba a pagar una sudadera que habían pedido todos los instructores para estar vestidos iguales y una de las pasantes era la encargada de recoger el dinero.

-Hola – dijo cuando entró y se encontró a varios pasantes, excepto a la chica que estaba buscando.

-¿Qué tal? – dijo MinHo, uno de los jóvenes que se encontraba en la oficina y estaba platicando con Taeyeon -¿A quién buscas? – 

-Busco a Tiffany, vengo a entregar el dinero de la sudadera – 

-Ahh… no tarda en venir, si tienes tiempo puedes quedarte aquí un rato en lo que regresa – 
Tenía 20 minutos para ir a su clase de Farmacología, así que tomó asiento en la silla libre, que de hecho era la de Tiffany.

Paseó su vista por unos segundos por la oficina solo para notar que YunHo, el pasante apuesto, estaba sentado muy concentrado estudiando, pero al verlo, fue como si el médico sintiera su mirada porque volteó y se le quedó viendo, para segundos después hacerle señas con la mano a modo de saludo y ambos dijeron

-Hola – 

Se volteó de nuevo para seguir estudiando y en ese instante entró Tiffany a la oficina. Jae Joong se puso de pie y la saludó y le entregó el dinero, después de ver como era registrado en la lista, se despidió de ella y antes de abrir la puerta para salir de la oficina dijo un “Adiós” en voz más alta para que lo escucharan el resto de los presentes y salió, volteándose para cerrar la puerta. En ese momento pudo notar como YunHo se volteaba para asomarse por el espacio que quedaba entre la puerta y la pared y le dijo 

-¡Adiós! – 

Jae Joong sonrió y se despidió también y fue hacia su clase, enviándole audios de su amigo Yoochun sobre lo sucedido y sobre todo platicándole lo tierno que le parecía ese pasante.

Vio su Facebook un momento antes de entrar a clase y de nuevo estaba el perfil de Jung YunHo como sugerencia, pero decidió ignorarlo como siempre, ya pensaría en una manera de acercarse a él después. Y con ese pensamiento en mente entró a su aula.

La clase de ese día era algo aburrida, sobre todo porque el equipo de alumnos que la estaba exponiendo no lo estaba haciendo muy interesante. Eso solo causaba que Jae Joong no pudiera tomar buenas notas del tema y empezó a quedarse dormido. Yoochun apenas le estaba respondiendo sus mensajes con un “espera, estoy en clase, escucharé tus mensajes de audio saliendo”, mensajes que hablaban sobre agregar a YunHo a Facebook. Suspiró por tener que esperar la respuesta completa de su amigo y sintió como sus ojos se estaban comenzando a cerrar de nuevo a mitad de la clase cuando la pantalla de su teléfono volvió a encenderse con una notificación de Facebook donde pudo leer claramente

“Jung YunHo te ha enviado una solicitud de amistad”

No es necesario decir que el sueño se esfumó por completo en ese instante.

Decidió aun así esperar la media hora que faltaba para terminar la clase para poder aceptarlo, tampoco quería que fuera a pensar que no tenía nada que hacer o que se la vivía pegado al teléfono. El hombre ya era todo un pasante, un médico recién graduado y él estaba a mitad de la carrera, quería hacerle ver que también era una persona responsable con sus estudios y le pareció lo más prudente esperar esa media hora para entrar a la red social.

Apenas llegó a su departamento y se cambió a ropa cómoda aceptó su solicitud y exploró su perfil, para conocer lo que pudiera de él a través de fotos y publicaciones y mirar un lado más personal de él, muy diferente a verlo todos los días como su superior en el departamento de Imagen y con bata todo el tiempo. 

Después de una hora de descanso de sus actividades en la facultad, de ver el perfil de YunHo y de platicar con Yoochun al respecto, se levantó y fue a su escritorio para estudiar sus clases del día siguiente y sobre todo, estudiar su clase de Imagen para dar la clase con su grupo y ser un buen instructor, como siempre se proponía cada Jueves por la tarde al estudiar sus diapositivas, iba a terminar de verlas todas cuando la última imagen le causó un gran conflicto porque no podía entender lo que tenía que ver en la radiografía de abdomen, la obstrucción se veía exactamente igual que el íleo y se suponía que eran diferentes. 

Fue ahí cuando pensó en su gran oportunidad de hablar con YunHo en persona. 

-Le preguntaré esta duda directamente a él – se dijo a si mismo y se puso de pie después de varias horas para hacer de cenar y elegir su vestimenta formal del Viernes. Estaba emocionado porque le quedaba como anillo al dedo el hecho de tener que vestirse con pantalón de vestir, camisa y corbata para ir a hacer una historia clínica al hospital y tener sesión con los instructores de Rayos, así podría ver a YunHo y daría una buena imagen.

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Cuando despertó ese día se sintió con mucha energía y con un buen presentimiento. Se arregló para sus clases del día y caminó 10 minutos desde su departamento hasta la facultad. Las clases transcurrieron de forma normal y al llegar a la sesión semanal de Rayos sintió su corazón palpitando más fuerte de lo normal por lo nervioso que comenzaba a sentirse, además de que ese día estaban haciendo preguntas a los nuevos instructores y él lo único que podía hacer era volverse chiquito en su silla esperando que no lo vieran y no tuviera que describir algún estudio en frente de todos los demás instructores mayores, que obviamente tenían más experiencia que él.

Para su suerte la sesión terminó, quedando 15 minutos libres antes de empezar su siguiente clase y como si YunHo lo estuviera esperando, todos los demás pasantes se pusieron de pie y caminaron a la entrada del auditorio mientras que él se quedó sentado en su lugar. Jae Joong se acercó con su iPad en la mano y tomó aire antes de inclinarse detrás de él para poder hablarle.

-Hola, oye tenía una duda con esta diapositiva, no sé si me pudieras explicar para dar mi clase en un rato – 

-Hola, claro que sí – sintió como YunHo se había sorprendido un poco por su presencia y ni siquiera volteó a verlo, tan solo tomó la Tablet de las manos de Jae Joong y la observó un momento antes de explicarle las diferencias entre ambas radiografías.

-Deja de ligar Jae Joong – escuchó el pelinegro acercarse a su amigo Heechul, también instructor nuevo del departamento y que cursaba el mismo semestre que él.

-Jajaja, cállate Heechul – 

-Ah, ¿Se conocen? – preguntó YunHo y saludó a Heechul chocando su puño.

-Sí, somos amigos desde micro – dijo Jae Joong.

-Ya veo – dijo YunHo y le regresó su Tablet a Jae Joong. Hablaron algo sobre la fiesta de bienvenida que estaba planeada para ese fin de semana y se despidieron, para salir del auditorio Heechul y Jae Joong juntos.

Iban caminando y riéndose como siempre, porque cuando Jae Joong y Heechul estaban juntos se la pasaban diciendo tonterías y contando chistes y nunca podían dejar de reír. Pero esta vez Jae Joong se puso un poco más serio y le dijo a Heechul.
-Está muy guapo YunHo – 
Y se lo dijo a Heechul porque sabía que su hermano mayor era uno de los mejores amigos de la carrera de YunHo, entonces eso significaba que Heechul tenía años de conocerlo. 

-¡Yunhie!, aww, es bien bueno y tierno, y sí, guapo, deberías hablarle, está soltero, tiene rato que terminó su relación – 

-¿De verdad?, es que siento que hay algo ahí ¿sabes?, se me ha quedado viendo por dos semanas y solo nos saludamos de lejos, desde que le sostuve la mirada en una de esas veces – 

-Vaya, pues dale, ya se hablaron hace rato, a ver que pasa en la fiesta de mañana – 

-Ay pero no sé cómo acercármele en una fiesta, hace rato solo le hablé para preguntarle una duda de mi clase de ahorita – 

-Te juntas conmigo en la fiesta, yo estaré con ellos porque van los demás pasantes y son amigos de mi hermano también, y ahí aprovechas y le hablas – le guiñó un ojo y Jae Joong sonrió, aceptó el plan de Heechul y se despidió de él para ir con sus alumnos. 

Las horas pasaron, los viernes eran su día más ocupado de la semana ese semestre y pronto dieron las 5 pm. Se encontraba caminando hacia su departamento y enviándole audios a Yoochun de todo lo que había pasado en ese día, salió del chat de su mejor amigo por un instante porque su celular vibró con un nuevo mensaje y se sorprendió demasiado al ver que era un mensaje del mismísimo Jung YunHo. Ni siquiera lo abrió, tan solo leyó el preliminar que aparecía en su nombre y volvió al chat de Yoochun para mandarle más mensajes, emocionado porque no podía creer que YunHo le hubiera hablado. 

Cuando llegó a su departamento se quedó en la sala y abrió el mensaje de YunHo. 

“Hola, soy YunHo (pasante de rayos)”

Adjuntó dos imágenes y al final escribió

“Espero esto te ayude a resolver la duda”

Jae Joong por alguna razón estaba muy feliz, aunque fueran solo dos imágenes del libro de rayos explicando lo que él le había dicho con sus propias palabras horas atrás, pero el hecho de pensar que YunHo se había tomado el tiempo de buscar su número de teléfono entre las otras 150 personas que se encontraban en el grupo de rayos lo hizo sentirse especial. 

Escribió “Hola! Muchas gracias, ya me quedó más claro”

Y no esperó mucho para recibir una respuesta

“De nada, buen fin”

“Igual!, lindo fin(:” respondió y dejó su teléfono sobre el sillón y bailó de felicidad. 

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Bienvenidos a otro "Martes de Broken" :) 

Prácticamente la mitad del fanfic será dividida de esta forma, un capítulo de la actualidad, que es realmente donde se está desarrollando la historia, y un capítulo del pasado, para entender lo que sucedió entre YunHo y Jae Joong. 

Leer sus comentarios la semana pasada y ver como la mayoría estaba igual de feliz que yo por tener nuevo material YunJae después de mucho tiempo me recordó precisamente porque decidí retomar el proyecto, así que de todo corazón, muchas gracias. 

Espero disfruten este capítulo 

(Disclaimer 1: Desconozco completamente como se manejan las escuelas de medicina de Corea del Sur, realmente dudo que hagan un "servicio social" como en Latinoamérica, pero bueno, sigue siendo ficción. 

Disclaimer 2: Cualquier parecido con la realidad, si es que alguien que me conoce en persona lee aquí jajajja, es mera coincidencia)


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