Crazy Love: Capítulo 4

Por la mañana Jae Joong despertó, sintiendo como unos fuertes brazos lo tenían atrapado. Volteó a su derecha para encontrarse con el rostro de un dormido YunHo, el cual tenía una sonrisa. Trató de moverse para alcanzar las cobijas y taparse mejor del frío, pero el agarre del moreno se lo impidió haciéndose algo más fuerte.

-¿Qué pasa?, Aún es temprano – dijo con voz adormilada

-Tengo frío – YunHo se levantó y tomó dos de las gruesas cobijas que tenía la cama, tapó bien a Jae Joong  y a él mismo y volvió a abrazar al pelinegro.

Se quedaron en silencio un momento, pensando en que decir. Desde el beso que se habían dado en la noche, no habían vuelto a hablar de eso y se sentían nerviosos al estar al lado de la persona que les gusta, aun cuando ya sabían que sus sentimientos eran correspondidos.

-Jae – el pelinegro volteó a ver a YunHo, dándole a entender que tenía su atención. Al tenerlo de frente, el menor aprovechó para robarle un beso a Jae Joong.

-Tengamos una cita –

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Se preparó nervioso para su cita de ese día, reparando por primera vez en su apariencia. 

Notó que su cabello estaba más largo que otras veces, llegándole casi a los hombros, lo cepilló un poco y eligió que ropa usaría.

Por otro lado, YunHo también se preparaba, él jamás había pensado en que ropa ponerse, pero ahora se encontraba indeciso. Al final optó por algo sencillo.

-¿Estás listo? – preguntó YunHo al pelinegro después de haber tocado la puerta de la habitación.

-Si – se escuchó la respuesta dentro del cuarto y el moreno entró, encontrándose con un resplandeciente Jae Joong que estaba cerrando su maleta.

-Vamos – dijo tomando al mayor de la mano y jalándolo hacia él para darle otro beso.

~o~o~o~o~o~ CRAZY LOVE ~o~o~o~o~o~

Lo primero que hicieron, siendo ya las dos de la tarde, fue ir a comer algo, se dirigieron a un restaurante de comida china y estuvieron unas horas ahí. Platicaban sobre muchas cosas, haciendo volver esa confianza que existía entre ellos desde que eran amigos. 

Seguido de eso fueron al cine, donde vieron una película de terror, haciendo que Jae Joong se asustara demasiado que no soltó el brazo de YunHo en toda la función.

Siguieron caminando por la ciudad después de salir del cine, hasta llegar a un pequeño festival de la ciudad, en donde había algunos juegos mecánicos.

-Vamos allá – dijo emocionado Jae Joong señalando el carrusel. YunHo se le quedó viendo sin creerle.

-¿Qué pasa? – pregunta el pelinegro al no haber obtenido respuesta por parte del menor. 

Entonces al ver la cara de YunHo, el mayor comprendió que le daba pena, y rio por lo bajo, para que YunHo no lo escuchara. Tomó su mano y lo llevó al juego.

Ante la mirada extraña de algunos niños, ellos se subieron el juego, uno enseguida del otro. Y aunque no lo quiso admitir al principio, el moreno terminó divirtiéndose al igual que Jae Joong, y más al ver la sonrisa del mayor, aquella que de ahora en adelante sería solamente para él.

Caminaron más por el lugar hasta llegar a un puesto donde vendían anillos de pareja. Eran anillos sencillos, de color dorado brillante, y delgados. Ambos se pararon a observar los anillos, hasta que YunHo estiró su mano tomando dos iguales, solamente de diferente tamaño, pero del mismo estilo. Colocó uno en la mano del pelinegro, y como si conociera aquellos blancos dedos desde hace años, el anillo entró a la perfección.

-¿Te gusta? – Pregunta YunHo sin soltar su mano.

-Si – Respondió Jae Joong con un ligero sonrojo en sus pálidas mejillas.

-Es tuyo entonces – dio un beso a su mano y colocó el otro anillo en su propia mano.

-Gracias ahjumma – dijo YunHo a la señora que atendía el puesto después de pagar por los anillos, la mujer solo asintió aun fantaseando como toda una fujoshi por la escena que acababa de presenciar.

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De regreso a la capital, YunHo dejó a Jae Joong en su casa, como todo buen novio, lo acompañó hasta la puerta de la residencia Kim. Se despidió de él con un beso y acordaron verse al día siguiente.

-Estoy en casa – avisó el pelinegro cuando entró en su hogar, siendo recibido por sus ocho hermanas mayores.

-¡¿Cómo te vas de viaje sabiendo que vendríamos?! – le reclamó Jae In, una de las Kim. Pero no lo dejaron ni responder porque se lo llevaron casi a rastras a su habitación.

-¿Cómo estuvo el viaje con tu novio? – preguntó esta vez Soo Young, otra de sus hermanas, una vez se sentaron todos en la cama del pelinegro y cerraron la puerta del cuarto con seguro.

-¡¿Eh?! – dijo Jae Joong casi gritando de la sorpresa.

-Era broma, sabemos que es tu mejor amigo – dijo Bora para calmarlo, pero el pelinegro dijo.

-Si es mi novio – momento de silencio.

-Es… ¿en serio? – pregunta Soo Young, ahora completamente seria, al igual que todas sus hermanas.

-Si… mmm… me dijo que le gustaba y… nos besamos – respondió bajando cada vez más la voz, pero aun así fue lo suficientemente fuerte para que lo escucharan.

Otro momento de silencio le siguió a esa declaración de Jae Joong, pero fue reemplazado por los gritos de sus hermanas.

-Nuestro Joongie ya tiene novio – se escuchó decir a una de sus hermanas.

-Aww, está enamorado – dijo con ternura Jae In.

-Una pareja gay en nuestra familia, ¡Qué lindo! – dijo Soo Young, la fujoshi de las hermanas Kim.

-¿Cuándo se lo dirás a mamá y papá? – preguntó Bora.

-… Necesito hablar con YunHo primero sobre eso – pensó un poco y volvió a hablar – no se lo digan… quiero hacerlo yo –

Todas asintieron y salieron del cuarto del muchacho, guardando el amor secreto de su hermanito.

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-Yunhie-ah – llamó el mayor al moreno que estaba sentado a su lado en el sillón de la casa del primero.

-¿Si? – volteó a ver a Jae Joong dándole toda su atención.

-He estado pensando… Tenemos que decirle a nuestros padres que estamos juntos ¿No lo crees? – YunHo pensó por un momento aquello, no sabiendo que decir. Él conocía perfectamente la respuesta que le darían sus padres, incluso antes de preguntarles. Él sabía que le dirían “¡NO!” desde que comenzó a sentir algo por el chico pelinegro, pero aun así él había decidido seguir a su corazón. Solo que ahora también debía enfrente aquel obstáculo.

-¿Yun?, ¿Estás ahí? – pregunta el pelinegro agitando su mano frente al rostro de YunHo, sacándolo de sus pensamientos.

-¿Eh? –

-Quédate a cenar en mi casa hoy, ahí les diré –

-¿Estás seguro? – preguntó con miedo el menor.

-Si… además, estarán mis hermanas para apoyarme – se tomaron de las manos.

-Está bien – respondió el moreno, volteando a verlo de nuevo y acercando su rostro al de él dispuesto a besarlo.

Unieron sus labios en un beso simple al principio, pero conforme pasaban los segundos esta iba tomando mayor intensidad. YunHo tomó el control total de aquel beso, hasta el momento en que se separaron por falta de aire. El moreno delineó con su lengua el labio inferior de Jae Joong, para después besarlo de nuevo, esta vez pidiendo acceso con su lengua a la boca del mayor.

Un nervioso pelinegro abrió su boca solo unos centímetros para corresponder el beso del menor, sintiéndose completamente extraño al hacer aquello, pues así como aquella vez en Busan había sido la primera vez que había besado a alguien, aquella también era la primera vez que daba un beso “estilo francés” con su novio.

Se fueron recostando lentamente sin romper nunca el beso, más que cuando sus cuerpos les reclamaban por oxígeno. Y es que cuando ellos se besaban, era como si el mundo desapareciera, entraban en una dimensión en la que solamente existían ellos dos y nada ni nadie más.

Las manos del moreno no se quedaron atrás y comenzaron a moverse por el cuerpo de su novio, pasando por sus brazos y terminando en su cintura, comenzando a levantar la camiseta del mayor para colarse dentro de ella.

Ante esta acción Jae Joong se sobresaltó, pensando que iban demasiado rápido, por lo que puso sus manos sobre el pecho de YunHo, apartándolo un poco.

El chico, extrañado por aquella acción, volteó a ver a su pareja, encontrando en su mirada un mar de dudas y nervios.

-Está bien, no haré nada que tú no quieras – le dijo con ternura, sacando su mano de la ropa del mayor y acomodándole de nuevo la camiseta. Le dio un pequeño beso y lo abrazó, girándose en aquel sillón en el que muy apenas cabían los dos acostados, para que Jae Joong quedara sobre él y abrazarlo contra su pecho.

-No me siento listo aún – dijo el pelinegro de unos minutos.

-Está bien Boo… yo te espero –

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Hola! Capítulo cortito pero espero que les guste de todos modos ^^
HAHA les juro que leo de nuevo los capítulos de este fanfic y me dan ternura y risa, con mi inocente y cuera percepción del amor en preparatoria... espero no ser la única que se sienta asi :P aunque claro, eso no quita el hecho de que es una de las sensaciones más bonitas que se pueden sentir por ser de los primeros amores que se tienen en la vida :P 

Anyways, actualizaré cuando tenga un respiro de nuevo de la facultad :) Gracias por esperar! 

L@s amo

~Always Keep The Faith~