Visita & Comenta en: I LOVE YOU JUST THE WAY YOU ARE

miércoles, 3 de julio de 2019

Broken: Capítulo 11




La luz de la mañana de ese domingo entrando por la ventana despertó a YunHo. Se cubrió los ojos por un momento para adaptarse a la iluminada habitación y cuando por fin pudo mantenerlos abiertos se dio cuenta de que no estaba en su cuarto.

Comenzó a inspeccionar el lugar en donde estaba para tratar de reconocer el terreno, para identificar cualquier cosa que le pudiera dar indicios del lugar en donde se encontraba y no entrar en pánico. Su cabeza le dolía un poco y sentía mucha sed, todo por haber tomado alcohol la noche pasada.

-¿Por qué no te abres a la opción de conocer gente nueva? – recordó escuchar esa pregunta la noche anterior.

-¿Quién eres? – preguntó al aire.

Y la respuesta a su pregunta llegó casi al instante cuando la puerta que se encontraba frente a él se abrió y Changmin, el interno del hospital donde trabajaba, salió del baño con su uniforme clínico.

-YunHo-ah, despertaste al fin – dijo con una ligera sonrisa.

-¿Changmin-sshi? – fue lo único que pudo salir por parte de YunHo.

-Me imagino por tu cara que no recuerdas nada – dijo con tranquilidad al observar al médico algo frustrado tratando de hacer memoria. – Está bien, no pasó nada importante –

-¿Nada importante? – preguntó YunHo.

-No… estás completamente vestido – le señaló con el dedo. YunHo volteó hacia su cuerpo y vio que era cierto.

“Perfecto, porque no sabría como reaccionar si tuve relaciones con él y no recuerdo absolutamente nada de aquella noche” pensó.

Se levantó y fue hacia el baño para lavarse la cara antes de decirle al joven que tenía que irse a su casa, ni siquiera tenía idea de su ubicación actual porque esa era la primera vez que pisaba el departamento del interno, pero ya se preocuparía por llegar a casa cuando saliera de ahí.-

Jae Joong salió de su departamento con un termo de café en una mano y su teléfono en la otra, lo guardó en el bolsillo de su pantalón tan solo para poder cerrar la puerta con llave y justo cuando se dio la vuelta chocó con YunHo, quien iba caminando por el pasillo directo a su casa.

-Perdona- dijo Jae Joong

-Descuida, no pasa nada, ¿vas tarde? – dijo YunHo.

-No… entro en 1 hora y media, quería desayunar, no tengo nada en casa – respondió.

-Ya veo… - volteó a ver la puerta de su propia casa y de nuevo a Jae Joong – Si me esperas unos minutos te acompaño a desayunar, solo quiero bañarme –

El Jae Joong de antes, el que no iba a terapia con un psiquiatra, se hubiera negado de inmediato. Pero ahora, después de 2 sesiones y de haber aceptado los sentimientos que aún tenía hacia el cirujano, decidió que era momento de regresar a la vida de su ex esposo.

-Está bien –

-Pasa entonces – le abrió la puerta y entró después de él. –Ponte cómodo, no tardaré – lo dejó en la sala y se metió al baño.

Era la primera vez en todo el tiempo que YunHo llevaba en Japón, siendo su vecino, que entraba a su departamento. El lugar tenía todo el estilo del neurocirujano: completamente limpio y ordenado, en colores negro, gris y blanco; con un gran librero al igual que en su propio hogar, lleno de libros de medicina y algunos cuantos de literatura y física, justo los que a él le gustaba leer también.

Su mirada se detuvo en un retrato de Seung Jae sonriendo en medio del abrazo de YunHo y Jae Joong. Sintió un nudo en la garganta cuando lo vio y lo tomó entre sus manos con cuidado, pasando su pulgar por la fotografía, como si pudiera volver a tocar a la persona que se encontraba plasmada ahí, como si pudiera volver a sentir las mismas emociones de aquella ocasión. Tenía una mezcla de sentimientos en su interior, reconocía felicidad, tristeza, nostalgia, coraje e impotencia principalmente y una lágrima recorrió su mejilla. Entonces escuchó como el agua paró y la puerta del baño se abrió, dejando salir a YunHo con una toalla envolviendo su cintura. Se limpió rápidamente las lágrimas y volteó hacia su ex, quien estaba a medio metro de él.

-¿Estás bien? – le preguntó.

-Si… ¿por qué lo preguntas? –

-Tus ojos se ven rojos y… - su mirada se dirigió hacia el portarretrato que estaba entre las manos de Jae Joong.

-Solo recordaba algunas cosas, estoy bien – sonrió débilmente y dejó el cuadro en su lugar – Anda vístete, tengo hambre –

Unos minutos después YunHo salió listo para ir a comer algo, con su mochila sobre sus hombros al igual que Jae Joong y con su teléfono y llaves en la mano.

Caminaron hacia una cafetería a unas cuadras del edificio de departamentos, pidieron algo rápido para desayunar y se sentaron a esperar su comida.

-¿Tuviste guardia anoche? – preguntó Jae Joong, recordando que YunHo apenas estaba entrando a su departamento hace un rato.

-Mmm… no, solo fui a tomar y me quedé dormido en casa de un amigo –

-Oh, ya veo –

En eso su comida fue servida y como no tenían tanto tiempo comenzaron a comer y hablaron un poco sobre sus pacientes y sus pendientes en el hospital.

-

Cuando entraron al hospital fueron a los vestidores y después de dejar sus cosas en los casilleros cada quien fue a su respectiva área de trabajo.

Los pacientes llegaban uno tras otro a urgencias, pero sorprendentemente no estaba llena la sala, cada interno tenía al menos un paciente y él tenía 2 además de estar encargado de escuchar los casos que le presentaban sus residentes e internos, podía decirse que era un día tranquilo, pero nadie usaba esa palabra porque era como una maldición, decir que una guardia estaba tranquila era invocar a que sucediera todo lo contrario, a que ocurriera una accidente, un fenómeno natural o cualquier otro evento desafortunado que trajera suficientes pacientes al hospital para llenar urgencias y que todo se transformara en un caos.

Aun así, lo que era aún más inusual era el hecho de que no había tenido que llamar a interconsulta con neurocirugía en toda la mañana, lo cual implicaba no ver a YunHo.

Justo cuando quería verlo las excusas no aparecían.

Alrededor del medio día, con algunas camas vacías y todo aparentemente bajo control, decidió ir a la cafetería por algo de comer dejando encargado el servicio a sus residentes.
Estaba rellenando su termo con agua después de guardar su sándwich en su uniforme y vio a YunHo salir del lugar siendo seguido por Changmin.

-Creí que Changmin estaba rotando por cardio esta semana – dijo para sí mismo al verlo caminar detrás de su ex esposo.

Decidió seguirlos porque notó como el interno sonreía al hablarle a YunHo, lo cual lo hizo sentir curiosidad sobre el tipo de relación que tenían.

Sabía que YunHo era muy amigable y solía tratar bien a todo el personal del hospital justo como él, tanto a sus colegas adscritos como a residentes, internos, enfermeras, paramédicos, etc. Así que podía ser solamente que tuvieran una buena conversación porque ambos eran de Corea y podían dejar de pensar en hablar en japonés por un momento y tener una conversación más fluida en su idioma natal.

Casi los alcanza cuando los ve pasar por la puerta que daba a una de las escaleras del hospital y escucha a Changmin decir

-Aquí nadie puede interrumpirnos, siempre vengo aquí cuando quiero estar solo un momento, descubrí que son las escaleras menos transitadas en todo el hospital –

-Bueno en todo hospital debe de haber un lugar en el que puedas irte a respirar un instante – dijo YunHo.

Jae Joong se quedó detrás de la puerta escuchando su conversación.

-Changmin-ssi – dijo YunHo.

-Oh vamos, solo dime Changmin, ya tenemos confianza –

-Eres un mocoso mal educado por hablarme sin honoríficos ¿lo sabías? – le reprochó el médico pero aun así Changmin siguió hablando como siempre.

-Changmin… ¿De verdad no sucedió nada anoche?, tengo esa laguna mental después de que mi sexta cerveza y después desperté en tu departamento –

-¿Realmente no recuerdas nada? –

-De verdad, así que por favor solo dime lo que sucedió, dime que vergonzosamente tuviste que cargarme hasta tu departamento y dejarme tirado en tu cama por lo borracho que estaba –

-Bueno… si hice eso… -

-¿Pero? – preguntó YunHo, porque el tono con el que respondió el interno le indicaba que no era todo lo que tenía que decir.

-También nos besamos, ¿no lo recuerdas? –

-¿Qué?, ¿te besé? – preguntó sorprendido YunHo.

Jae Joong ahogó un grito al escuchar aquello.

-Yo te besé a ti… pero bueno, tú me correspondiste, así que supongo que es culpa de ambos –

-Changmin… yo… -

-¿Vas a arrepentirte?, porque yo no lo hago. Sinceramente me pareciste sumamente atractivo cuando llegaste al hospital, debo admitir que tu actitud arrogante y de “puedo hacer todo lo que quiera” me pareció muy sexy y cuando supe que eras neurocirujano… bueno entendí de donde venía ese complejo de dios. También pensé que tenías algo con el doctor Kim, o al menos eso me diste a entender cuando dijiste que querías recuperarlo, pero tal parece que las cosas entre ustedes dos no van bien así que decidí arriesgarme a tener una oportunidad también –

YunHo se quedó callado ante tremenda declaración.

A decir verdad no era la primera vez que algún empleado del hospital le confesaba sus sentimientos, después de todo Jung YunHo era un apuesto médico ejerciendo una especialidad complicada y que requería de mucho pensamiento y rendimiento, así que no era de extrañarse que se encontrara en ese tipo de situaciones. Sin embargo, YunHo era alguien que siempre rechazaba de la mejor manera a todas esas personas porque amaba a su esposo y le era fiel.

Pero ahora que estaba soltero y sintiendo a Jae Joong lejos de él, las palabras de la noche anterior, que ahora sabía las había pronunciado Changmin, volvían a resonar en su cabeza y lo pusieron a pensar.

¿Por qué no abrirse a la posibilidad de tener algo con alguien más?

Después de todo él sabía que la vida era demasiado corta (demasiado en algunas ocasiones) para desperdiciarla en perseguir a alguien que quiere estar solo.

-Changmin… -

Jae Joong no escuchó nada después, ni una palabra por parte de los dos hombres, así que se arriesgó a que lo descubrieran espiando su conversación y se asomó por la ventanilla de la puerta, tan solo para encontrarse con una imagen que jamás pasó por su cabeza en todo el tiempo que estuvo con YunHo.

Se estaban besando.

------

La inspiración tardó mucho en llegar a mi después del último capítulo que escribí. 
Para ser honesta, era más fácil para mi escribir las escenas donde YunHo y Jae Joong eran jóvenes porque me basaba en algunos hechos reales, así que las palabras fluían como agua entre mis dedos y solo tecleaba y tecleaba hasta completar lo que tenía que decir. 
Ahora solo será lo que creo que hubiera sucedido... o lo que me hubiera gustado que sucediera. 
Pero ya saben, las personas nunca siguen el libreto que tienes preparado mentalmente... 

Espero hayan disfrutado el capítulo, ya era hora de meterle algo más de drama para reavivar la historia. 

~Always Keep The Faith~


Siguiente capítulo